Una nueva etapa judicial se abrió en Estados Unidos con la declaración de “no culpable” del empresario argentino «Fred» Machado, acusado por narcotráfico, lavado de activos y estafa. La audiencia, realizada ante el tribunal federal del distrito Este de Texas, marcó el inicio formal del proceso que lo enfrentará a un juicio oral previsto para 2026.
La decisión de Machado de rechazar un acuerdo con la fiscalía cerró la posibilidad de una negociación que incluía, entre otras opciones, aportar información sobre sus vínculos políticos y empresariales. En ese contexto, quedó descartada cualquier colaboración vinculada con el diputado José Luis Espert, quien había sido mencionado en el expediente por una transferencia de 200 mil dólares recibida en 2019.
Aquella operación ocurrió poco después de que Espert lanzara su candidatura presidencial. El legislador sostuvo entonces que el dinero correspondía al pago de una consultoría económica para una empresa minera ligada a Machado. Sin embargo, la revelación del vínculo generó un fuerte revuelo político y derivó en su salida de la lista bonaerense de La Libertad Avanza.
Hasta que se defina su situación judicial, el empresario permanecerá detenido en el Centro de Detención del condado de Fannin, Texas. La audiencia previa al juicio fue fijada para el 9 de enero.
Semanas antes de ser extraditado, Machado había intentado despegarse de las acusaciones al argumentar que «no soy narco, no tengo nada que ver con drogas, nunca me asocié. Estuve en el lugar equivocado, en el momento equivocado y la gente en la que confié pensé que eran los buenos y eran los malos». Y agregó: «Yo nací y voy a morir en Argentina. Sigo en contacto con la fiscalía en Estados Unidos, que sabe que no tengo nada que ver con el narcotráfico. La comunicación se interrumpió cuando estalló esto, pero nunca oculté nada. Ahora Dios sabrá”.
Según reconoció Espert años atrás, ambos se conocieron por un contacto en común y compartieron un viaje a Viedma para la presentación de uno de sus libros.




