La fascinante leyenda del “Guardián de la Puna”. Este enigmático ser se oculta entre los peñascos de los cerros, desempeñando el papel de protector de los animales y guía para aquellos que se pierden de su manada.
El Coquena, según cuenta la tradición, muestra una naturaleza amable y compasiva hacia aquellos que realmente lo necesitan. Su presencia brinda consuelo y dirección en los terrenos montañosos, convirtiéndolo en una figura querida por quienes han experimentado su benevolencia.
Sin embargo, este mítico guardián no titubea al castigar a aquellos que transgreden la armonía natural. En particular, se dice que los cazadores atraen su ira, haciendo del Coquena un defensor incansable de la vida silvestre.
A través de generaciones, la leyenda del Coquena ha perdurado como un testimonio de la conexión entre el hombre y la naturaleza en los vastos paisajes de la Puna. Este ser legendario que, según la tradición, vela por el equilibrio y la convivencia pacífica en los altos cerros.