La Academia se prepara para enfrentar a Peñarol el próximo martes en el duelo correspondiente a los octavos de final de la Copa Libertadores, y Marcos Rojo ya se entrena con el equipo con la posibilidad de sumar algunos minutos en ese encuentro.
Sin embargo, la situación del defensor en el campeonato doméstico sigue siendo incierta, ya que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) aún no le otorgó la habilitación necesaria para participar. Según la normativa vigente, para que un jugador pueda ser inscrito debe haberse desvinculado de su club anterior antes del 24 de julio, condición que en este caso no se cumple.
Ante este escenario, la dirigencia de Racing trabaja para resolver el inconveniente, aunque las alternativas no son sencillas. Se barajó la posibilidad de revertir la rescisión con Boca Juniors y formalizar un préstamo, pero este camino no fue confirmado oficialmente y, además, la relación entre Rojo y el club porteño está lejos de ser cordial, lo que dificultaría cualquier negociación.
Otra opción que analiza el club es presentar un recurso legal para intentar obtener la habilitación a través de la Liga, evitando así la necesidad de un acuerdo con Boca. Este recurso debe manejarse con cuidado para no interferir con la inscripción que Rojo ya tiene en la Conmebol para disputar la Copa Libertadores con Racing.
Por ahora, el exdefensor de la Selección argentina está autorizado para jugar en competencias internacionales y en la Copa Argentina, aunque su participación en la liga local sigue en suspenso, limitando su calendario de partidos dentro de los objetivos del club.
