El vestuario del FC Barcelona vivió momentos de fuerte tensión tras el empate 1-1 ante el Real Betis. Más allá del resultado, que dejó pasar una chance clave de tomar distancia en la cima de La Liga, fue la actitud del brasileño Raphinha lo que acaparó la atención de todos.
Visiblemente molesto por el arbitraje, el extremo reaccionó con furia al finalizar el partido. Según se pudo ver en videos grabados desde la tribuna, el jugador tuvo una acalorada discusión con el arquero Marc-André ter Stegen, quien intentó contenerlo sin éxito. Incluso, hubo empujones y gritos, en una escena que refleja el mal clima que dejó el encuentro.
Ter Stegen, que continúa con su rehabilitación tras una seria lesión de rodilla, buscó calmar a su compañero, pero recibió una negativa tajante. La tensión escaló cuando Raphinha también se cruzó con el técnico Hansi Flick, a quien apartó con evidente fastidio cuando intentó intervenir.
Pero eso no fue todo. En su salida del campo, el brasileño encaró a uno de los jueces de línea y lanzó frases cargadas de enojo, acusándolo de tener una mala actitud y recriminándole un supuesto gesto de silencio. La situación dejó en claro el nivel de nerviosismo que reinó en el Camp Nou tras el polémico arbitraje de Gil Manzano.
El empate se dio en una jornada clave, ya que el Real Madrid cayó ante el Valencia en el Bernabéu, lo que le abría al Barça la posibilidad de sacar una ventaja importante en la tabla. Con ocho fechas por disputarse, el equipo catalán aún lidera, pero sabe que no puede permitirse más tropiezos.
Mientras tanto, el conjunto culé también tiene la mira puesta en otras competencias: disputará la final de la Copa del Rey contra el Real Madrid y se juega el pase a semifinales de Champions frente al Borussia Dortmund.
La gran incógnita ahora es cómo afectará este episodio la interna del plantel en plena recta final de la temporada.
