La quita de subsidios del gobierno nacional impactó fuertemente en los precios de los servicios. Desde los hogares, hasta los comerciantes se ven fuertemente afectados con esta medida. Así es como le pasó a Darío Villarruel, un comerciante cordobés.
Le llegaron $840.000 de luz. Darío hizo los pertinentes reclamos a la empresa que le provee el servicio, pero no tuvo respuestas efectivas. Por lo que se las ingenió y les devolvió la jugada de una manera muy ingeniosa.
Fue a las oficinas de la empresa, con una carretilla llena de billetes de 100 pesos. Así pagó su deuda. Además a modo de chiste, se puso una remera que decía “Cuando vaya a pagar la luz no diré nada, pero habrá señales”.
Por su parte Darío dijo que esos billetes eran su ahorro, que no tenía otra forma de pagar ese monto “Voy a pagar la luz que me vino en el negocio, ochocientos cuarenta mil pesos, todos billetes de 100 porque es lo único que estaba ahorrando. Son los ahorros, vamos a ver si el mes que viene podemos pagar la luz”.
La tensión y el humor social están a flor de piel, la indignación y la resignación, son moneda corriente.
