El barco que se espera sea el mayor crucero del mundo terminó su construcción en un astillero finlandés y realizó su primera incursión en aguas abiertas para realizar pruebas de mar antes de su entrega prevista para octubre de este año.
El Icon of the Seas de Royal Caribbean International mide 365 metros de eslora y pesará unas 250.800 toneladas. En comparación, es como intentar mantener a flote dos torres CN.
Cuando zarpe de las aguas del Caribe en enero de 2024, tendrá capacidad para 5.610 pasajeros y 2.350 tripulantes.
La pieza de resistencia del barco será el mayor parque acuático del mundo en el mar. Bautizado con el nombre de Categoría 6, contará con seis toboganes que batirán récords, pero los huéspedes que deseen una experiencia más tranquila también podrán relajarse en las siete piscinas y nueve bañeras de hidromasaje abordo.
El barco promete más de 40 formas de cenar, beber y entretenerse, muchas de ellas incluidas en la tarifa del crucero. Con 20 cubiertas y ocho zonas por explorar, la idea es atender a todo tipo de vacacionistas, desde zonas dedicadas a familias jóvenes hasta espacios solo para adultos, como el primer bar de pianos a dueto de Royal Caribbean International.
Hay 28 tipos de alojamiento diferentes, con más categorías para familias, más distribuciones con vistas al océano y más espacio para viajeros en grupo. La naviera dice que es el periodo más largo que ha dedicado a “diseñar la base perfecta”.
El Icon of the Seas es también el primer barco de Royal Caribbean International propulsado por gas natural licuado (GNL) y tecnología de pilas de combustible, como parte de la apuesta de la compañía por un futuro con energías limpias.